Tarta camuflaje

Esta tarta la hice recientemente para el cumple de mi churri, no es difícil adivinar sus aficiones al verla...
Se trata de un bizcocho de chocolate relleno de salsa de naranja y ganaché de chocolate negro.

Ingredientes:

- Un bizcocho de chocolate que haremos siguiendo la receta del bizcocho de vainilla pero con los siguientes cambios: quitamos 50 gr de harina que sustituiremos por 50 gr de cacao puro en polvo ( yo uso Pedro Mayo desgrasado) y 1/4 tsp más de levadura royal y no añadiremos vainilla, aunque esto es para gustos.
- para la ganaché: 200 gr de chocolate negro para postres y 350 ml de nata para montar.
- para la salsa de naranja: 3 cucharadas soperas colmadas de mermelada de naranja amarga, 2 cucharadas soperas de azúcar moreno y el zumo de 2 naranjas.

Elaboración:

Una vez que tenemos el bizcocho listo, lo dejamos enfriar.
Mientras se ha estado horneando habremos preparado la ganaché de la siguiente manera: echamos en un cazo 200 ml de nata y el chocolate troceado, lo ponemos al baño Mª y removemos hasta que esté completamente disuelto y de un color brillante. Apartamos aproximadamente la mitad en un bol, que reservaremos para usar como cobertura a Tª ambiente. A continuación añadimos la nata restante en el cazo al fuego removiendo hasta que se integre perfectamente con la mezcla que ya teníamos; vertemos en un bol profundo y dejamos enfriar en la nevera para semi-montarlo cuando esté muy frío.
En otro cazo echamos juntos todos los ingredientes que vamos a usar para la salsa o coulis de naranja, lo ponemos al fuego y removemos hasta que el azúcar se halla disuelto por completo y tengamos una salsa lo bastante homogénea. Retiramos del fuego y dejamos templar.

 

Montaje:
Abrimos la tarta por la mitad con ayuda de una lira o un cuchillo adecuado.
Empapamos ambas mitades con la salsa de naranja.
Rellenamos con la ganaché semi-montada (la que lleva más nata) y tapamos el bizcocho.
Cubrimos con la cobertura de chocolate alisando bien la superficie con una espátula.
Seguidamente lo decoramos a nuestro gusto, en mi caso hice un fondant de camuflaje con unos adornos, pero se puede echar una capa mayor de cobertura y adornar con ganaché con ayuda de la manga pastelera.

La tarta resulta jugosa y en contra de lo que pueda parecer, nada pesada.
Espero que os guste.

Por algún motivo, en esta foto del corte parece que el bizcocho está hundido, pero solo es un efecto óptico creado por el ángulo de corte.
Yo solo lo corté en dos mitades, pero con la altura que coge el bizcocho se podría cortar en tres partes y quedaría más alto y aun más sabroso.